Hace un tiempo atrás, cuando Rhoend era un foro, hablamos bastante del agua exĂłtica que utilizarĂa Saint Germain y que las crĂłnicas de Casanova reflejan de manera inmejorable. Yo mismo, siguiendo el lineamiento de Archibald Cockren, pensĂ© que podrĂa ser la destilaciĂłn del acetato de plomo, algo que puse en práctica y que pueden encontrar en el libro Los frutos de la montaña de los filĂłsofos. Pero me equivocaba.
Creo que esta explicaciĂłn que ahora esgrimirĂ© podrĂa sumarse a las muchas explicaciones que han intentado resolver el misterio. Pero para el lector que reciĂ©n ingresa a esta web, me gustarĂa ponerlo en contexto de lo que hablamos. Y nada mejor, que extraer de los libracos del veneciano sus memorias escritas. Veamos que dijo hace siglos atrás:
“Luego me enseñó su Arjeo (Archeus) que el llamaba AtoĂ©ter: era un lĂquido blanco en un frasquito parecido a muchos otros que allĂ habĂa; todos estaban tapados con cera; como me explicĂł que no era otra cosa que el espĂritu universal de la naturaleza, y lo demostraba el hecho de que ese espĂritu saldrĂa al instante del frasquito si se hacĂa en la cera el menor agujero con un alfiler, le roguĂ© que me mostrara el experimento; me dio entonces un frasquito y un alfiler invitándome a hacerlo yo mismo. PinchĂ© la cera, y al instante vi vacĂo el frasco.- Es magnĂfico, pero ¿para quĂ© sirve?.- No puedo decĂroslo.
Con esta sentencia acaba la conversaciĂłn acerca del espĂritu universal. Ahora bien, cuando probamos obtener la acetona a travĂ©s de la destilaciĂłn seca del acetato de plomo, esto es, el espĂritu de Saturno, no presentĂł ni por asomo esa increĂble volatilidad.
El tĂ©rmino atoĂ©ter me ha hecho pensar muchas veces en que podrĂa tratarse de un ácido mezclado con alcohol, dando por resultado algĂşn liquido de extrema volatilidad. Pero por ahora, nada se consiguiĂł.
Por supuesto, habrá quien piense que Saint Germain hablaba del famoso Parergon, que puede presentarse tanto transparente como color lechoso, es extremadamente volátil, y como el LSD , una solo microdosis puede ser extraordinaria, segĂşn afirman varios que mantienen esta “dieta”.
Por lo tanto, la teorĂa que presento podrĂa ser la más acertada. Se trata de utilizar hielos fabricados con amoniaco lĂquido, y colocar encima un recipiente cerrado, donde penetrarán los vapores al instante condensándose en forma lĂquida. Pero mejor vĂ©anlo en este video:
La evaporaciĂłn es instantánea. Y como todos sabemos, el espĂritu del mundo no es otra cosa que un vapor, más precisamente un vapor que contiene una sal, y esta sal hoy podemos conocer de quĂ© clase se trata: nitrito de amonio. Por lo que utilizar amoniaco, y decirnos Saint Germain que era el espĂritu del mundo, quizá no estĂ© tan alejado de la realidad.
Por supuesto, esto confirmarĂa las palabras de Casanova que siempre considerĂł a Saint Germain como un impostor y nunca accediĂł a los secretos de la naturaleza. La replica a esta teorĂa del amoniaco es que si asĂ fuera, Casanova habrĂa notado el aroma y lo habrĂa dejado por escrito, tan entusiasmado en demostrar que Saint Germain era un farsante. Y además, lo que sĂ describe era el color, blanco, y no transparente como vemos en el video.
¿Y tĂş, querido amigo, quĂ© piensas?.
0 Comentarios